miércoles, 30 de septiembre de 2009

Distancia

No entiendo el por qué, el leísmo, las piedras que hablan, las bicicletas inútiles en unas cuestas interminables. No puedo llegar a comprender que yo esté lejos cuando estoy cerca, que esté alegre cuando estoy triste, que esté aquí y allí y en todas partes como si fuese una diosa griega, autóctona, exótica. Inestabilidad crónica que me derrite con el sol y me congela con el viento que sopla por las noches desde mi ventana. Otras caras me despertarán por la mañana para decirme lo mismo: Bienvenida a tu camino interminable, a tu calle sin salida, a tu oportunidad nula, a tu fracaso o a tu victoria. Todo está en tus manos. Todo pende de un hilo. Todo y absolutamente todo cambia en menos de un segundo.


Ya.

2 comentarios:

  1. es extraño...
    se extraña, apretan las entrañas, pero de pronto, sin mayor alimaña, todo cambia!


    ...te extraño!

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  2. tu calle sin salida, todos en algun momento nos hemos sentido asi...perdidos, abandonados. pero al mal tiempo buena cara y no hay mal que dure 100 años. y en el momento que menos lo esperemos, todo volvera a brillar y la paz inundara mi camino, tu camino y volveras a sentirte optimista.
    un beso

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lunares